Es relativamente normal que los niños pequeños no quieran ir a la escuela, pero ¿qué pasa cuando tu hijo ya va a la primaria y de pronto ya no quiere ir a la escuela? esta situación puede deberse a varios factores.
Por qué mi hijo no quiere ir a la escuela
♥Porque sufre angustia por separación: en este caso la negativa será no sólo a asistir a la escuela, si no también en cualquier situación social en donde tenga que estar alejado de sus padres. Este caso requiere de ayuda profesional para solucionar el problema.
♥Porque lo molesta algún compañero: esta causa suele ser muy común y a veces los padres no le damos la debida atención, sobre todo si nuestro hijo no presenta síntomas de maltrato. Hay que hablar con el niño, con la maestra y, si es posible con los papás del niño. Esta situación se incrementa en las escuelas públicas donde la maestra está a cargo de 45 niños a los que difícilmente puede controlar por completo. De estos niños muchos pueden vivir situaciones de violencia en casa y eso se refleja en su comportamiento escolar. La hora del recreo es ideal para abusar del otro porque las maestras no pueden vigilar cada rincón de la escuela. Los niños de hoy están más inmersos en la violencia y pueden hacer mucho daño físico o mental a sus compañeros.
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♥Porque no le entiende a la maestra: o porque la maestra lo exhibió ante el grupo en una situación en la que él no conocía la respuesta. En la actualidad estamos acostumbrando a los niños a no estar en una situación problemática: los padres tendemos a tratar de resolver todas las situaciones antes de que afecten al hijo y no permitimos que desarrolle un nivel adecuado de tolerancia ni un nivel de frustración adecuado. Los chicos pueden sentirse mal y querer dejar todo para buscar algo que les de más satisfacción. Si tu hijo no le entiende a la maestra ayúdalo explicandole las materias que no comprenda y ponlo a practicar en casa sin que deje de ir a la escuela. Poco a poco se sentirá más preparado y se le gustará ir a la escuela de nuevo.
♥Porque se aburre hay chicos que son muy inteligentes y se aburren en clase porque no va al nivel que ellos pueden avanzar, si este es el caso trata que cambien a tu hijo de curso. En fin puede haber mil causas particulares por las que tu hijo no quiera ir a la escuela, por eso lo mejor es tener un plan para resolver la situación.
Qué hacer si tu hijo no quiere ir a la escuela
- Habla con él para descubrir por qué tu hijo no quiere ir a la escuela. Hazlo de manera tranquila y calmada para que te cuente la verdad, trata el tema de manera casual. Si tiene miedo a algún regaño puede no decirte la causa real de su negativa a asistir a la escuela.
- Habla con la maestra para recabar mayor información sobre la negativa de tu hijo a asistir a la escuela.
- Busquen soluciones juntos, por ejemplo: hablar con el niño que lo molesta, buscar un tutor particular o comprarle unos lentes de moda si es que el niño no quiere ir por algún problema visual.
- Analiza cuál es tu modo de referirte a la escuela, si tu hijo te escucha hablar de manera despectiva de la escuela puede hacer eco de tu comportamiento y por ese motivo le parece mejor dejar la escuela para hacer algo más divertido o más productivo.
- Consulta con un profesional. No hay que temer pedir ayuda cuando es necesario.
- Educa a tu hijo para que viva y disfrute aún a pesar de las malas rachas. Enséñale que ningún extraño debe tener tanto poder como para hacerlo llorar o lastimarlo.
- Cámbialo de escuela. si la situación no mejora puedes tratar de cambiarlo de escuela, aunque debes dejarlo claro que la huida no es una opción de resolución de problemas.
- Relájate, esta es sólo una situación más ante la vida, podrás salir adelante y le enseñarás a tu hijo la manera correcta de resolver un problema.